Los camerinos son el Valhalla de todo buen sarao que se precie, no importa el tamaño de la fiesta o el concierto, no importa que el evento en sí ya sea exclusivo y no importa que todos los asistentes sean ya la crème de la crème siempre habrá un espacio que estará reservado a un número ínfimo de personas, aunque quizás convendría más utilizar el término de celebridades; porque son ellas las que acceden a este lugar y las que le dotan de ese aura mítica tan característica.